NUESTRA ÚLTIMA MOLE

Una nueva edición de La Mole se llevó a cabo los días 13, 14, 15 y 16 de julio: ¡Estuvo horrible! Los dos primeros días no se pararon ni las moscas, imagínense que algunos de nosotros estábamos jugando “Tripas de gato” por la falta de gente. El sábado se compuso un poco, pero fue muy desagradable ver a muchos de los disfrazados haciendo sus dengues y exhibicionismos sexuales que sin ser mocho, realmente es grotesco ver disfraces mal hechos y hombres vestidos de mujer insinuándose a los chavitos.

Nuestro Estudio ha luchado durante muchos años promoviendo el arte del cómic como una profesión digna y que merece respeto, buscando acercar a los padres de familia a nuestro medio con la finalidad de que comprendan el mundo de los cómics que tanto les gusta a sus hijos, para encontrarnos conque algunos editores sin escrúpulos ponen mantas donde anuncian “clases de dibujo para realizar relaciones sexuales” o chavitas enclenques o gorditas destrozando la imágen de los personajes que representan. Repito, esto no nos asusta ya que también somos consumidores de cómic erótico (pero ERÓTICO, no sensacional de manga) y nos divierte el cosplay, pero como profesionales de este medio, lo que K! ve mal, es el descaro y la falta de respeto por un público familiar, y el utilizar por un lado, un evento que da la facilidad y el pretexto para desfogar las retorcidas situaciones internas de los que se disfrazan para tener una personalidad ficticia ya que carecen de una propia.



Por otro lado, el que los organizadores de éstos eventos no tengan el menor respeto por nuestro medio y que al contrario, participe de hundirlo más al promover la piratería, y la falta de escrúpulos de las jóvenes y los jóvenes que, como un virus, infectan tan noble medio y que a éste no le importe con tal de recibir su lana, si de lo que se trata al organizar y visitar un evento de cómics es que más gente se acerque a este mundo y no que se aleje, sobre todo neófitos y padres de familia que al fin y al cabo también son los que generan dinero a los expositores, pues son éstos los que proporcionan dinero a los hijos para comprar dentro de la feria. Obviamente existen excpeciones como los disfrazados de Star Wars que redimieron un poco a la gente que gusta del Cosplay y uno que otro disfraz muy bueno.

También, nos enteramos por las quejas de algunos aspirantes a artistas de cómics que se nos acercaban, que pseudo profesionales en este arte quienes participan en la revista Dibujarte no siendo profesionales, tienen el descaro de revisar portafolios y rayonean los dibujos originales de los que pedían su “asesoría", uno de ellos (al cual conocemos) habla pestes de nuestro Estudio al mismo tiempo que dice haber trabajado en ¡Ka-Boom!, y tirando veneno, “le aconsejó” al aspirante que no se nos acercara, así que, yo sí me acerqué al stand de Dibujarte para ver quién era, se trataba de un chavo que nunca trabajó con nosotros, simplemente estuvo tomando tips con mi padre en la extinta tienda ¡Ka-Boom! Cómics, y era parte de un grupito que nos visitaba pero jamás laboró en el Estudio, su nombre o sobrenombre es Ángel, y le decíamos “el Fenomenoide” por su parecido con este personaje, quien está de “Director de Arte” en esa empresa... ¡IMAGÍNENSE!



En fin… lo grotesco, la piratería de CDs, los disfraces tercermundistas, etc., estuvieron a la órden del día, lo único rescatable para nosotros fue la reunión con viejos y nuevos fans de Karmatrón y es por lo que siempre asistimos. Para nosotros, La Mole es un centro de reunión con los fans que siempre asisten y de gente nueva que nunca antes había estado en un evento de este tipo, esta vez llegó un camión de Xalapa lleno de amigos Karmatrónicos los cuales estuvieron un buen rato con nosotros; también estuvo en nuestro stand el Maestro Ramón Valdiosera, un monstruo de la Historieta Mexicana, de la vieja guardia, de su estudio salieron conocidos historietistas que han hecho historia en nuestro país pero nadie lo peló.



El Manga, el Anime y los otakus extremistas están destrozando nuestra cultura y esto es una pena, ya que todo por lo que se ha luchado se está desvaneciendo gracias al exagerado fanatismo y falta de sensibilidad para disfrutar la variedad de estilos que existen, llámese norteamericano, europeo o latinoamericano. A nosotros nos encanta el manga, pero también disfrutamos otro tipo de cómics.

Creo que los cómics ya murieron,( jamás pensé que diría eso) de ahora en adelante las ferias de piratería se deberían llamar: Festivales de Karaoke o de Cosplay.

A pesar de todo lo malo que ocurre en este tipo de eventos, queremos agradecer a Ignacio Septien por brindarnos su apoyo como siempre y por su amable atención a los miembros de K!, ya que aceptamos asistir por ser de los pocos lugares en donde nos podíamos reunir con nuestros fans, algunos de ellos de manera accidental ya que nunca pensaron encontrarnos ahí y esto es bueno para nuestro Estudio, por ejemplo, el domingo fue el mejor día a pesar de la marcha del "Peje" López Obrador, llegó mucha gente nueva y Karmacuates que no sabían nada de la nueva edición de Karmatrón, y al conocernos personalmente se retiraron felices sabiendo que nuestro cómic regresará muy pronto.

Sin embargo, a pesar de esto, creo que ya se rebasó el límite de aceptación de nuestra parte para seguir asistiendo, pues el arquitecto Septién avala muchas de las cosas que pasan ahí adentro: mientras sigan invitando a expositores piratas de manera cínica; mientras existan piratas como Martín López quien se está enriqueciendo a costa de personajes que no son suyos, con las combinaciones de personajes de DC, Disney, Simpsons, Marvel, etc., (¡ya hasta publicó un libro de su obra pirata, es el colmo de los colmos!).

Mientras que a los asistentes lo único que les interese es el Cosplay y lo manga pirata; mientras se invite a pseudoartistas que engañen y falten al respeto al público asistente, y todo el ambiente tercermundista que se respira en estos eventos, los verdaderamente profesionales ya no pondremos un pie en esos eventos nunca más, pero desgraciadamente, esto dará la estocada final al mundo del cómic en nuestro país. Es por esto que ustedes cómo público no ven a un Humberto Ramos, a un Bachan, etc., en estas ferias de piratería, porque ellos buscan eventos de otro nivel: PROFESIONALES.

A continuación les presento un artículo cuya fuente es de la Agencia Internacional EFE:

Casi 15.000 aficionados mexicanos celebraron durante cuatro días su amor por la animación y el cómic japoneses, los superhéroes, la fantasía y los vídeojuegos en el décimo aniversario de una de las convenciones más veteranas del país. La convención 'La Mole', que toma su nombre del héroe de la editorial estadounidense Marvel, cumple diez años en su actual ubicación, aunque esta es su decimonovena edición. De jueves a domingo, los aficionados sacaron sus mejores galas y acudieron en tropel a comprar camisetas, cómics, vídeos o productos diversos relacionados con sus series favoritas. >La estrella de la edición de 2006, que contó con unos ochenta expositores, llegó del sol naciente: el 'manga' y el 'anime' acaparaban la mayoría del espacio y de los disfraces. Fueron precisamente los aficionados a lo japonés, (otakus), los que dieron color a la convención con sus disfraces de aguerridos héroes y voluptuosas heroínas, extraídos de series como 'Full Metal Alchemist' o 'Hellsing'. 'Naruto', el último éxito manga, no ha llegado aún a México de forma masiva, por lo que sorprendía no ver la habitual concentración de aficionados disfrazados del joven ninja que protagoniza la serie. No faltaban personajes de otras fantasías del papel o la pantalla, como los imperiales de La Guerra de las Galaxias, los mutantes de X-Men, el Capitán Jack Sparrow de 'Piratas del Caribe' o los protagonistas de la saga de vídeojuegos 'Final Fantasy'. México cuenta con varias convenciones de gran tamaño, como TNT o la de la norteña ciudad de Monterrey, aunque en los últimos años han surgido una multitud de pequeñas reuniones, la mayoría de corta vida y dedicadas al mercadeo, que han devaluado un poco el mercado, según algunos expositores. La gran lacra es el material pirata, presente por todos lados de forma abundante. 'Por contrato, es responsabilidad de los propios expositores enfrentar cualquier conflicto con licencias', declaró a EFE Ignacio Septien, organizador de La Mole, para quien la piratería 'no existiría si la gente no comprara'. Un representante de la editorial ViD, Matías Pérez, señaló a La Mole y a TNT como las convenciones con mayor presencia pirata y lamentó el predominio de tiendas o vendedores ocasionales en lugar de empresas editoras. Al contrario de las convenciones europeas y estadounidenses, en México no es habitual que éstas incluyan charlas de autores o mesas redondas, algo que los profesionales del medio echan de menos.

(*) Vía EFE

En fin…¡Ka-Boom! Estudio ya no asistirá a La Mole, sólo estará presente en algunos eventos del interior de la República y en los que no se avale la piratería mientras los organizadores se hacen “ojo de hormiga”. Desde nuestras humildes trincheras trataremos de poner en el mapa a nuestro querido cómic, no atacando al Manga ya que es una forma de arte muy importante a nivel mundial, sino al fanatismo desmedido de sus seguidores, triste sería degustar sólo comida japonesa, habiendo una infinidad de sabores de la cocina mundial.